top of page

El autoconocimiento está referido tanto a rasgos de personalidad, aptitudes y destrezas, como a las preferencias profesionales. Una reflexión sincera sobre estos aspectos pondrá de manifiesto las fortalezas y debilidades personales y profesionales, lo que ayudará a definir un objetivo profesional coherente. Para un correcto autoconocimiento debes saber cuáles son tus:
 
-  Conocimientos: A través de la experiencia laboral, de los estudios y de experiencias no formales. Debemos preguntarnos qué hacíamos, qué era lo que más nos gustaba hacer y en qué destacabamos, tanto en trabajos como en los estudios. 
- Habilidades: Tenemos que saber las distintas habilidades que poseemos y ponerles nombre. Algunas de ellas son las habilidades para la comunicación, Idiomas, los conocimientos TIC...
- Intereses: Tus intereses son todo aquello que te gusta hacer, independientemente de que se trate de una actividad física, intelectual, creativa o de otra naturaleza. Los intereses determinan las elecciones profesionales.
- Características personales: Para conocerlas sugiero preguntarnos ¿Cómo soy? y de ahí hacer una lluvia de ideas.

Todo ello nos proporcionará una visión de nosotros mismo confeccionado por media de aquello que somos, es decir, desde nuestro autoconocimiento.

bottom of page